Antes de describir cómo funciona un crematorio, conviene saber qué es exactamente
Un crematorio es un edificio o parte de un edificio donde se incineran los cuerpos de las personas fallecidas. Este proceso se denomina cremación. La palabra «crematorio» viene del latín y significa «lugar para quemar cuerpos».
La cremación es el proceso de quemar los cadáveres para reducirlos a cenizas. En la mayoría de los países, los restos incinerados suelen colocarse en una urna y ser guardados en casa por los familiares o amigos del fallecido; en algunas culturas, sin embargo, se guardan en un templo o iglesia.
En algunas culturas, esta práctica se realiza por motivos religiosos, mientras que en otras se hace por razones de salud. El proceso de cremación elimina toda la materia orgánica del cuerpo, dejando sólo los fragmentos de hueso. Este procedimiento puede utilizarse para deshacerse de un cuerpo o para reducir su tamaño y poder enterrarlo en un espacio más pequeño.
Diferencia entre crematorio y horno crematorio
En ocasiones la gente suele confundir ambos términos. A pesar de estar relacionados uno con otro, son cosas distintas.
Los crematorios son los edificios que ofrecen un espacio para la cremación final de los restos humanos. Pueden encontrarse en cementerios y funerarias, y proporcionan un lugar para preparar al difunto para su entierro o cremación, así como una sala anexa en la que los familiares pueden velar y despedirse de su familiar o ser querido.
Por otro lado, los hornos crematorios son la herramienta utilizada para incinerar los cuerpos.
Cual es el funcionamiento de un crematorio
Cuando una persona fallece es el momento de decidir si se quiere enterrar o incinerar. Lo más adecuado en estos casos es solicitar asistencia funeraria a una empresa especialista, que te ayudará a gestionar todos los trámites.
Antes de pasar al proceso de cremación, los familiares asistirán al tanatorio en donde los familiares podrán despedirse del difunto. Una vez finalice la ceremonia, el cuerpo del difunto será trasladado al crematorio o a la sala de cremación en caso de que el tanatorio cuente con una.
Para poder gestionar la cremación es necesario rellenar una serie de papeles, como el certificado de defunción.
La incineración se realiza de manera individual para después entregar las cenizas a los familiares de cada persona. Gracias a la utilización de hornos crematorios el proceso no dura más de un par de horas, ya que estos hornos son capaces de alcanzar temperaturas muy elevadas, llegando hasta los 800 grados.
Historia de los hornos crematorios
El primer horno crematorio fue construido en el año 1850, aunque no fue hasta 20 años más tarde cuando se permitió su utilización debido a la mentalidad de esa época y al gran número de retractores que se oponian. Hasta ese momento, las cremaciones se realizaban al aire libre utilizando carbón.
En el año 1878 comenzaron a crearse los primeros hornos crematorios en Alemania e Inglaterra, y fue en el año 1963 cuando se finalizó la prohibición de incinerar a los difuntos.
En España el primer crematorio se construyó en Zaragoza y a día de hoy, es posible encontrar lugares en donde las incineraciones superarn a los entierros comunes.
¿Cuál es el precio de una incineración?
Generalmente el precio varía bastante dependiendo del lugar en el que se lleve a cabo, los servicios contratados o el seguro que tenía contratado el difunto.
Nuestra recomendación es que si estás interesado en este proceso, te pongas en contacto con una funeraria que te ayude a tomar la mejor decisión y que te sirva de guía para decantarte por el servicio que más se adapte a tus necesidades o presupuesto.